El biometano puede ser la clave para la independencia energética del país y la apuesta por una economía circular, facilitando la gestión de residuos, pero se encuentra aún a la espera de un impulso que iguale su desarrollo al de los países vecinos, donde nos adelantan en cuanto a la instalación de plantas. Ésta fue la principal conclusión del foro organizado por el periódico ‘La Información Económica’ en colaboración con Naturgy en el que se señaló la senda para alcanzar los objetivos de los gases renovables. Un evento en el que participó la CEO de BIOCIRC, Margarita de Gregorio, junta a Nuria de Lucas, responsable de Transición Energética de Gases Renovables de Naturgy, y José Luis Cabo, subdirector general de Hidrocarburos y Nuevos Combustibles del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
El gas renovable ha sumado numerosos avances en los últimos años, incluida la reciente actualización del PNIEC para el periodo 2023-2030 que ha ratificado y ajustado algunos de los objetivos planteados para el final de la década, y ha acercado su posición a la industria y los hogares. Sin embargo, el sector sigue a la espera de un empujón que integre las ventajas de esta energía en el consumo y la producción en España en una apuesta de la administración y la industria por la descarbonización. Sobre todo en el caso del biometano, una alternativa real dadas sus ventajas de implementación, producción y transporte para enfrentar los desafíos de la transición energética que se complementará en el medio plazo con el hidrógeno verde para dar cumplimento a las metas.
Desde el Ministerio, José Luis Cabo defendió la evolución que han experimentado los gases renovables en la última década, sin embargo, advierte de que hacen falta nuevos proyectos. “Ya empiezan a salir y en los próximos años esperamos que esto vaya a más. La ambición está allí, los objetivos son realistas”, señala Cabo. Margarita de Gregorio, por su parte, aseguró que la base ya está, lo que hace falta es ambición y un impulso a estos gases, fundamentales para la descarbonización, que los igualen al mismo nivel que otras energías renovables. “Ahora tenemos la oportunidad de apostar por los gases renovables”, afirmó.
Desde Naturgy, Nuria de Lucas explicó que esta transición hacia los objetivos debe ser ordenada. “Confiamos plenamente en conseguir una neutralidad tecnológica”, señaló De Lucas. De hecho, la apuesta particular de la responsable es por el biometano, una alternativa “que está, que existe y que es madura”, aseguró la experta. Todo ello frente a otras opciones como el hidrógeno verde que “todavía no es una tecnología madura” y cuya entrada en el mercado no está preparada. “Las industrias no pueden parar para sustituir el hidrógeno gris por el verde”, explicó Nuria de Lucas, responsable en Naturgy. La alternativa que ofrece la posibilidad de no parar la fabricación es el biometano, cuya implementación aprovecha los sistemas ya existentes de las alternativas no renovables, por lo que su llegada, de momento, puede ser más ecológica.
Un impacto más reducido en la instalación no es lo único que hace de este gas una alternativa madura, tal y como explica Margarita de Gregorio, que señaló la potencialidad que tiene en España para la producción de biometano:
“España es un país que tiene sus recursos biomásicos absolutamente infrautilizados”, aseguró De Gregorio, “somos el tercer país europeo en superficie forestal arbolada, pero extraemos muchísima menos biomasa, un 25% menos que la media europea”, añadió la CEO. En BIOCIRC confiamos en el biogás como la solución más inmediata en la que se aprovechan los recursos ya existentes para producir y almacenar y que además las empresas pueden aprovechar en su objetivo de descarbonización. Se trata de la alternativa integradora, se integran los territorios y las industrias”, señaló Margarita de Gregorio.
Fuente: La Información